viernes, 26 de febrero de 2010

¿Recibes más Spam en Facebook o en Xing?

Al hilo de una conversación en Facebook originada por una persona , os dejo aquí la misma para que os animeís a opinar al respecto:

Interlocutor 1:
No se ya que hacer para que en la red Xing no me hagan spam de ofertas de productos o servicios que no me interesan cómo claramente he indicado en mi perfil. ¿Alguna sugerencia?
Interlocutor 2:
salir de la red, estoy pensando en ello.
Interlocutor 1:
Ya lo habría hecho de no ser porque, de vez en cuando, hago capturas de pantalla para mis libros, artículos, conferencias o cursos.
Interlocutor 3
Utilizar la LSSI como si fuera un bolso con una plancha dentro....
Interlocutor 4
Date de baja... cada día me lo planteo más
Interlocutor 1:
Imagina que yo veo un perfil donde el usuario expone que le interesan los proveedores de fertilizantes de plantas, ¿porqué le debería yo vender mis servicios de marketing a través de las redes sociales? De hacerlo sería una falta de respeto enorme e inadmisible en el mundo profesional.
La gente ha perdido las mínimas reglas de cortesía y creen que porque sea más sencillo conectar con alguien se pueden saltar todo el protocolo relacionado con las relaciones comerciales efectivas. Y no es así.
Interlocutor 5:
Yo estoy a punto de darme de baja. El otro día me di de baja del único grupo en el que estaba, pero no me gusta nada el criterio que tienen los de xing. Me parece que es un auténtico fracaso.
Juan Antonio Galindo Torres
Vamos a ver, me presento, primero, he sido Ambassador Xing de la Comunidad Valenciana durante 2 años, y ahora soy Ambassador Xpert Xing de Diseño y Programación Web 2.0 dirigiendo el 2º mayor grupo del mundo de habla hispana dentro de los grupos Xpert ( Mar si que sabe mi trayectoria, el resto no lo se, porque no tengo el gusto de conoceros ).
Xing recibe el mismo spam que cualquier red social, yo estoy en casi todas las importantes ( Facebook, Xing, Twitter, Linkendin,...) y recibo solicitudes de todo tipo, concretamente en Facebook todos los dias recibos que me haga admirador de innumerables "fanpages" que para nada me interesan, ni de las cuales he pedido nada a sus Administradores, simplemente las voy rechazando y cuando un determinado "amigo" me bombardea repetidas veces lo suelo dar de baja, ...
Dicho esto, no digo que Facebook es una red social de "spam" y que estoy pensando en borrarme de Facebook por "spam", simplemente es un "pago" que tengo que dar a cambio de poder estar en una red social dinámica como es Facebook.... Ver más
Con Xing pasa lo mismo, de vez en cuando, como comenta Mar se reciben mensajes inadecuados o propuestas sin valor, en estos casos, si una persona molesta, la das de baja de tu red o si es un newsletter te das de baja del grupo correspondiente.
En mi opinión profesional y de verdad, que yo uso las dos redes ( Facebook y Xing ) al 100%, os puedo certificar que Facebook tiene mucho más "spam" que Xing.
Y para daros fe de ello, me voy a copiar capturas de las dos redes de los "spams" para hacer estadisticas, ademas en mi caso rondo los 600 amigos en ambas redes con lo cual es equitativo, en un par de meses, os enseñare el estudio.
Muchas gracias a todos por vuestro tiempo y saludos.

sábado, 20 de febrero de 2010

Esto tambien pasará.


Una buena amiga, Cristina Monfot, me ha recomendado la lectura de un texto, esta extraido de:
http://www.genteloca.com/biblioteca/7756/esto-tambien-pasara
No sé el origen inicial, pero en cualquier caso, cito las fuentes que me lo han echo llegar, la verdad, es que al acabar de leerlo te da mucha tranquilidad de afrontar mejor los retos diarios, aqui os lo dejo y espero que lo disfruteís:


Una vez ;un rey citó a todos los sabios de la corte, y les manifestó:”Me he mandado hacer un precioso anillo con un diamante con uno de los mejores orfebres de la zona.Quiero guardar oculto dentro del anillo , algún mensaje que pueda ayudarme en momentos de desesperación total. Un mensaje al que yo pueda acudir en momentos de desesperación total. Me gustaría que ese mensaje ayude en el futuro a mis herederos y a mis hijos de mis herederos. Tiene que ser pequeño, de tal forma que quepa del diamante de mi anillo”.

Todos aquellos que escucharon los deseos del rey, eran grandes sabios , eruditos que podían haber escrito grandes tratados…pero ¿pensar un mensaje que contuviera dos o tres palabras y que cupiera debajo de un diamante de un anillo? Muy difícil. Igualmente pensaron, y buscaron en sus libros de filosofía por muchas horas, sin encontrar nada en que ajustara a los deseos del poderoso rey.

El rey tenia muy próximo a él, un sirviente muy querido. Este hombre, había sido también sirviente de su padre, y había cuidado de él cuando su madre había muerto, era tratado como la familia y gozaba del respeto de todos.

El rey por esos motivos también lo consultó. Y este le dijo:

“No soy un sabio, ni un erudito, ni un académico, pero conozco el mensaje”

¿”Como lo sabes preguntó el rey”?

“Durante mi larga vida en el palacio, me he encontrado con todo tipo de gente, y en una oportunidad me encontré con un místico. Era un invitado de tu padre, y yo estuve a su servicio. Cuando nos dejó, yo lo acompañe hasta la puerta para despedirlo y como gesto de agradecimiento me dio este mensaje”.

En ese momento el anciano escribió en un diminuto papel el mencionado mensaje.
Lo dobló y se lo entregó al rey.

“Pero no lo leas,-dijo. Manténlo guardado en el anillo. Ábrelo solo cuando no encuentres salida en una situación”.

Ese momento no tardó en llegar, el país fue invadido y el rey perdió el reino.
Estaba huyendo a caballo para salvar su vida, mientras sus enemigos lo perseguían. Estaba solo, y los perseguidores eran numerosos. En un momento, llegó a un lugar donde el camino se acababa, y frente a él había un precipicio y un profundo valle.

Caer por el, sería fatal. No podía volver atrás porque el enemigo le cerraba el camino. Podía escuchar el trote de los caballos, las voces, la proximidad del enemigo.

Fue entonces cuando recordó lo del anillo. Sacó el papel, lo abrio y allí encontró un pequeño mensaje trmendamente valioso para el momento.

Simplemente decía “ESTO TAMBIEN PASARÁ”. Fue en ese momento que fue consciente que se cernía sobre él, un gran silencio.

Los enemigos que lo perseguían debían haberse perdido en el bosque, o debían haberse equivocado el camino. Pero lo cierto es que lo rodeó un inmenso silencio.
Ya no se sentía el trotar de los caballos.

El rey, se sintió profundamente agradecido al sirviente y al místico desconocido.
Esas palabras habían resultado milagrosas. Doblo el papel, volvió a guardarlo en el anillo, reunió nuevamente su ejercito y reconquistó su reinado.

Ese día en que estaba victorioso a la ciudad, hubo una gran celebración con música y baile…y el rey se sentía muy orgulloso de si mismo.

En ese momento, nuevamente el anciano estaba a su lado y le dijo:

“Apreciado rey, ha llegado el momento para que leas nuevamente el mensaje del anillo”

¿Qué quieres decir? Preguntó el rey-“Ahora estoy viviendo una situación de euforia, las personas celebraron mi retorno, hemos vencido al enemigo”.

Escucha dijo el anciano este mensaje no es solamente para situaciones desesperadas, también es para situaciones placenteras. No es solo para cuando te sientes derrotado, también lo es para cuando te sientas victorioso. No es solo para cuando eres el último, sino también para cuando eres el primero.

El rey abrió el anillo y leyó el mensaje “ESTO TAMBIEN PASARA” , y nuevamente sintió la misma paz, el mismo silencio, en medio del a muchedumbre que celebraba y bailaba . Pero el orgullo , el ego había desaparecido. El rey pudo terminar de comprender el mensaje. Lo malo era tan transitorio como lo bueno.

Entonces el anciano le dijo:

“Recuerda que todo pasa. Ningún acontecimiento ni ninguna emoción son permanentes. Como el día y la noche; hay momentos de alegría y momentos de tristeza. Acéptalos como parte de la dualidad de la naturaleza porque son la naturaleza misma de las cosas.